En la batalla contra la obesidad y la diabetes, dos nuevos protagonistas han llegado a España: Mounjaro (también conocido como tirzepatida) y Wegovy. La comunidad médica los considera los “King Kong y Godzilla” de los medicamentos contra la obesidad y la diabetes, señalando un cambio importante en la lucha contra estos problemas de salud.
¿Son estas píldoras mágicas? Para nada, dice Cristóbal Morales de la Sociedad Española de Obesidad (Seedo). En una entrevista con el diario español El Mundo, enfatizó que “no son varitas mágicas”, sino herramientas poderosas que ayudan a mejorar la salud junto con un estilo de vida saludable. Se trata de beneficios reales para la salud, no solo de adelgazar.
Mounjaro destaca – ¿Mejor que Wegovy?
Mounjaro ya está causando revuelo al mostrar resultados de pérdida de peso superiores al 20%, superando a su competidor Wegovy. No solo ayuda a reducir la cintura; también mejora el colesterol y la presión arterial, convirtiéndose en un campeón en varios frentes.
Estudios clínicos, como el reconocido ensayo Surmount, han demostrado que Mounjaro puede reducir el peso hasta un impresionante 22.5%. Además, ha mostrado un control de azúcar en la sangre más efectivo que otros tratamientos para la diabetes, una ayuda clave para quienes padecen diabetes tipo 2.
Javier Escalada, presidente de la Sociedad Española de Endocrinología, lo calificó como “el primero de su clase para pacientes con diabetes que no logran controlarse solo con dieta y ejercicio”. Todas las dosis estudiadas mostraron mejores resultados en la reducción de azúcar en sangre y peso en comparación con otros tratamientos.
¿Quiénes pueden acceder a Mounjaro?
Por ahora, Mounjaro está aprobado para dos grupos: personas con diabetes tipo 2 y aquellas con obesidad, definida como un índice de masa corporal (IMC) superior a 30, o de 27 con problemas de salud asociados, como hipertensión, enfermedades cardiovasculares o apnea del sueño.
Pero, antes de lanzarte a comprarlo, recuerda que no es una solución rápida. Como advirtió Escalada, este medicamento se usa junto con una dieta saludable y ejercicio regular. No es para perder unos kilos antes de las vacaciones, sino para personas con problemas de peso y salud serios.
Beneficios para los usuarios de Mounjaro
Los beneficios van más allá de la báscula. Estudios han encontrado que personas sin diabetes que usaron Mounjaro perdieron hasta un 22.5% de su peso en 72 semanas, con casi la mitad de los pacientes perdiendo un 25% o más. Además, redujeron su cintura entre 14.6 y 19.9 cm, recuperando la capacidad de realizar tareas diarias que antes resultaban difíciles debido a la obesidad.
Mounjaro también reduce los triglicéridos hasta un 31.4%, mejora el colesterol HDL ‘bueno’ y baja la presión arterial, lo que es crucial para la salud cardiovascular.
Costo y receta de Mounjaro
Mounjaro no es barato. Su costo varía entre 100 y 300 €, y el mantenimiento a largo plazo ronda los 271 € mensuales, es decir, casi 9 € diarios. Además, no está cubierto por el Sistema Nacional de Salud de España, por lo que debes asumir el costo.
Este medicamento solo está disponible con receta, y expertos como Escalada insisten en que los médicos deben supervisar a los pacientes de cerca para evitar un mal uso y asegurar que llegue a quienes realmente lo necesitan.
La ciencia detrás de Mounjaro: Doble control
¿Qué hace a Mounjaro diferente? Este medicamento actúa sobre dos receptores: GIP y GLP-1, que son claves en la regulación del azúcar en sangre y el apetito. Es esta acción dual la que, según los expertos, hace que Mounjaro sea más eficaz que otras opciones, incluyendo el popular Ozempic. Los receptores GIP, presentes en las células de grasa corporal y en las áreas del cerebro que controlan el apetito, pueden ayudar a los usuarios de Mounjaro a controlar mejor la insulina, reducir el consumo de energía y disminuir el hambre.
Efectos secundarios: No todo es magia y adelgazamiento
Como cualquier medicamento potente, Mounjaro también tiene efectos secundarios, principalmente digestivos: náuseas, diarrea y vómitos, en su mayoría leves a moderados. Solo entre el 4% y el 7% de los pacientes en ensayos clínicos dejaron de tomarlo debido a efectos secundarios, pero los usuarios deben estar preparados para posibles molestias.
Posibles efectos secundarios graves
- Peligro de pancreatitis: Existe un riesgo real de pancreatitis, una condición dolorosa que puede causar dolor abdominal severo, náuseas y vómitos.
- Problemas renales: La deshidratación debida a problemas digestivos puede afectar a los riñones, por lo que se recomienda supervisar su función.
- Complicaciones en la vesícula: También existe el riesgo de problemas en la vesícula biliar, como cálculos, dolor abdominal superior, fiebre y coloración amarilla en la piel (ictericia).
- Tumores de tiroides: Estudios en animales han indicado un posible riesgo de tumores de tiroides, especialmente con semaglutida (Ozempic). Aunque los datos en humanos son limitados, las personas con antecedentes de cáncer de tiroides deben ser cautelosas y consultar a su médico.
Ambos medicamentos funcionan al imitar hormonas intestinales que envían señales de saciedad, pero Mounjaro va más allá con una combinación única que afecta dos receptores hormonales en lugar de solo uno. Esta estrategia ha demostrado ser aún más eficaz en la pérdida de peso, especialmente entre quienes luchan contra la diabetes tipo 2.